GRACIAS 2018

Estos ojos fueron testigos de la prueba de amor colectivo más bonito y conmovedor que haya visto jamás. Fueron muchos años de este sentimiento contenido que hicieron estallar desenfrenadamente a los hinchas peruanos de todo el mundo rumbo a una lejana, ajena y misteriosa Rusia. Peruanos que partieron siguiendo a los suyos, siguiendo sueños propios y ajenos, siguiendo a la selección de todos, poco importó el idioma, la moneda, la distancia, a veces pienso que si hubiera sido “Marte 2018” de todas maneras llegábamos también convirtiendo de local cada sede.  Despedimos un 2018 teñido de blanquirrojo o rojiblanco, con alegrías, tristezas, triunfos y derrotas como la vida misma. De esos años en los que uno quisiera que se repita siempre, esos que nos inflan el pecho de orgullo y nos hacemos uno, juntos y fuertes. De esos que sin esperar nada a cambio entregas y de repente hasta te llevas el premio del mejor hincha. De esos años en que miles estampamos en nuestros corazones el himno nacional de PERÚ en un mundial. Es cierto que tuvimos un paso fugaz en Rusia 2018, pero también es cierto que fuimos testigos de la entrega, ilusión y ganas que le metimos todos, sin excepción, las ganas de dar lo mejor y hacer bien las cosas, todo por nuestro PERÚ. Tal vez no se avanzó de ronda ni se logró el objetivo, pero como país recuperamos nuestro amor propio e identidad. Sólo teníamos la consigna de gritar al mundo que somos peruanos, que estamos de vuelta y que, aunque a miles de kilómetros lejos de casa, los nuestros no estarían solos.  Porque así somos los peruanos, porque somos «querendones», agradecidos, así «apapachamos» a los nuestros, porque somos enormes y maravillosos de sentimientos, nobles y aguerridos a la vez, somos inmensos cuando nos juntamos persiguiendo el mismo objetivo: amar lo nuestro. Lo cierto es que luego de Rusia 2018 muchos más en el mundo sabrán que existe un país lejano, un lugar en el mundo donde juegan bonito fútbol, se visten de blanquirrojo y que tiene LA MEJOR HINCHADA DEL MUNDO ¡ARRIBA PERÚ CARAJO! ¡FELIZ 2019!